El IBE se queda en casa
Durante estos días de confinamiento por el Coronavirus, muchos de nosotros tenemos que cambiar nuestra actividad y adaptarla a las posibilidades que nos brindan las cuatro paredes de casa. Toda una oportunidad y también un reto para muchos de nosotros, y desgraciadamente un gran hándicap para la investigación de algunos compañeros y compañeras.
Para conocer de primera mano como está afectando esta situación al IBE, hemos llamado a la puerta de algunos miembros de la comunidad, y nos han explicado los más y los menos de su "investigación confinada".
Salvador Carranza (Vice-director del IBE, Investigador Principal)
Hola Salvador, ¿nos podrías explicar como está siendo tu día a día en confinamiento?
Por mi parte estoy aprovechando para escribir artículos y acabar revisiones pendientes. También son buenos días para hacer cosas que en otras circunstancias no haría. En mi caso, repasar las más de 20.0000 fotos de Arabia que tengo para hacer una guía de Omán y empezar a preparar los contenidos con los compañeros del laboratorio. Esto me ha permitido volver a viajar desde casa a lugares increíbles y revivir momentos y situaciones inolvidables e irrepetibles. ¡También recordar a toda la gente que ha formado parte de mi grupo a lo largo de los años! Llevo dos semanas viajando desde mi despacho.
Judit Sainz (Administración del IBE)
Hola Judit, ¿cómo está impactando a tu trabajo esta época de confinamiento?
El impacto es mayoritariamente a nivel de contacto con el personal. Nos ha hecho replantear algunas cosas como las compras, y retrasar algunas incorporaciones de estudiantes en prácticas. Por otro lado, estoy aprovechando para ordenar y acabar las cosas que en el día a día me es imposible hacer.
¿Qué es lo que te está resultando más difícil de gestionar estos días y qué es lo que el confinamiento te está “ayudando” a hacer?
Lo más complicado es gestionarlo todo por correo, pues en persona todo es más inmediato. Por otro lado, hacer teletrabajo en tiempo de confinamiento me ayuda a concentrarme. A mí me es más fácil gestionar las distracciones de casa que las del trabajo, a pesar de que ver la nevera constantemente es una distracción difícil de gestionar.
¿Hay algo que hayas aprendido durante estos días?
Durante estos días de confinamiento he aprendido a ser más paciente y organizada, tanto en el trabajo como en casa.
¿Ya sabes qué es lo primero que harás cuando puedas salir de nuevo?
¡Claro! lo primero que haré será ir a Oliana, a casa de mis padres y que mi madre me haga una paella. Después, y una vez volvamos al 100% a la normalidad, viajaré a Inglaterra. Dentro del IBE tengo muchas ganas de hacer un café con los compañeros y ponernos al día.
Sergi Valverde (Investigador Principal del IBE y "docente en confinamiento")
Hola Sergi, ¿cómo es la experiencia de preparar un curso universitario para un formato online?
Nunca había hecho un curso universitario en estas condiciones, y está suponiendo un reto muy grande. Me he dado cuenta de que el feedback que me dan los alumnos en clase presencial permite ajustar (y/o reformular) la dificultad de la lección. Otra dificultad es cómo sustituir la pizarra, que normalmente uso mucho en mis clases. Finalmente, está la necesidad de compaginar la vida familiar con la profesional. Lógicamente, se hace muy difícil encontrar espacios continuados de trabajo sin interrupciones. En mi caso, además, la conexión a internet tampoco es muy fluida.
Teniendo todo esto en cuenta, he decidido grabar las clases siguiendo un formato similar al de la Khan Academy, es decir, hacer las lecciones grupos de 3-4 videos cortos de 6-12 minutos cada uno, centrados en un concepto. Por suerte, Judit me ha enviado un iPad con lápiz a casa que me facilita muchísimo la producción de los videos. Por otro lado, la necesidad de manipular y editar los videos hace que el proceso de preparación de las clases se alargue (el doble de tiempo, aproximadamente).
La resolución de dudas la resuelvo con los medios típicos (e-mail, zoom). En este sentido, la UPF nos proporciona una herramienta colaborativa (Campus Global) que a pesar de no ser perfecta, nos permite hacer nuestro trabajo de manera más o menos razonable.
¿Cuál crees que es el mayor reto que tendrá que enfrentar este formato? A la vez, crees que también es una oportunidad?
No tengo claro como evaluaremos el curso. Pienso que este año daré más peso a los trabajos, porque no sé cómo se puede hacer el examen a distancia. Aun así, pienso que es una buena oportunidad para todo el mundo (estudiantes y profesorado) de ganar experiencia en esta modalidad de enseñanza en línea.
¿Crees que esta experiencia cambiará el sistema educativo y el formato de clase y evaluación presencial?
No estoy seguro de las implicaciones a largo plazo de este "experimento". Todo depende de si esta situación se prolonga el tiempo suficiente. En cualquier caso, hay que aprovechar esta ocasión para aprender y abrir nuevos caminos.
¿Ya sabes qué es lo primero que harás cuando puedas salir de nuevo?
Me gustaría mucho conocer a mis alumnos en persona, ahora mismo solo hablamos en línea. Por otro lado, con mis compañeros de investigación y docencia tenemos la buena costumbre de comer juntos después de las clases. ¡Estoy deseando reencontrarme con mis amigos!
Vivien Horvath (Estudiante de doctorado del IBE)
Hola Vivien, ¿Cómo está impactando a tu tesis doctoral esta época de confinamiento?
Por suerte a mi me tocó en "buen momento" el confinamiento, porque ya he acabado los experimentos principales de la tesis. Aun quedan algunas cosas pendientes, pero sin ellas ya puedo depositar así que ahora estoy escribiendo la tesis y estamos preparando un artículo. Por suerte todas estas cosas las puedo hacer desde casa, aunque tardo mas tiempo y no es tan cómodo.
¿Qué es lo que te está resultando más difícil de gestionar estos días, y qué es lo que el confinamiento te está “ayudando” a hacer?
A veces me resulta difícil enfocarme en lo que estoy haciendo, porque al final no es como una situación normal simplemente trabajando desde casa. Hay días en que me resulta un poco difícil manejar el estrés de la tesis y de estar encerrada. Por otra parte, el confinamiento me está ayudando a dedicar más horas a la tesis.
¿Ya sabes qué es lo primero que harás cuando puedas salir de nuevo?
En el laboratorio primero de todo tendré que preocuparme de las moscas, y después acabar los experimentos que quedan. Fuera del laboratorio, primero de todo quiero ir a tomar un café de verdad, porque llevo todo el confinamiento tomando café soluble y no es lo mismo :)
Vicente Vives (Habilitado pagador del IBE)
Hola Vicente, ¿cómo está impactando a tu trabajo esta época de confinamiento?
La principal consecuencia que tiene el confinamiento en mi trabajo es que algunos procedimientos que son sencillos, cotidianos y cómodos de hacer, en casa se convierten en complicados, incómodos, casi imposibles. Hay un menor volumen de trabajo, pero una mayor dificultad para realizarlo. Por contrapartida, una cosa positiva de estos días es ver que, con unas buenas condiciones materiales (ordenadores, red, acceso remoto, etc.) una parte del trabajo administrativo se podría hacer desde casa sin problemas, siendo más eficiente en algunos procesos que implican silencio y atención. La verdad es que en mi caso no estoy aprovechando para adelantar las “cosas que vamos dejando”, pues mi día a día sigue siendo intenso y la jornada laboral vuela.
¿Qué es lo que te está resultando más difícil de gestionar estos días y qué es lo que el confinamiento te está “ayudando” a hacer?
La gestión más difícil es la que requiere el acceso a documentación. Por suerte, un porcentaje muy alto de correspondencia es digital. Por otra parte, lo más problemático es que las exigencias en los procedimientos administrativos no se han rebajado ni relajado. Algunos de los plazos justificativos, por ejemplo, se han interrumpido, pero no todos. También hay bajas de personal entre los interlocutores habituales que hacen más complicados procesos que habitualmente son sencillos. Un problema importante para la administración del IBE ha sido que no había preparado un plan de teletrabajo. Tenemos aquí mucho trabajo por delante para evitar que una circunstancia inesperada nos afecte de nuevo en el futuro.
¿Hay alguna cosa que hayas aprendido durante estos días?
He aprendido a organizarme la despensa y calcular con antelación los menús de la semana y también a hacer pan. Pero lo que más me ha sorprendido descubrir es que, incluso en la ciudad, tenemos trocitos de naturaleza alrededor y que nos pueden alegrar el día: oír cantar a los pájaros, ver como les salen hojas a los árboles o como el aire está más limpio… no todo han sido malas noticias. También lo imprescindible que es tener a otros seres humanos cerca.
¿Ya sabes qué es lo primero que harás cuando puedas salir de nuevo?
Dentro del IBE es fácil: me iré a desayunar al bar de siempre con el resto del equipo de administración… la verdad es que tengo ganas de ver que todo el mundo está bien. También tengo ganas de dar las gracias a la gente que me ha animado durante estos días y abrazar a todas las personas a las que he echado de menos... pero eso no va a poder ser. A partir de ahora tendremos que ir con mascarilla y guantes...
Fuera del IBE, en cuanto pueda me iré a mi casa en el bosque, a des-confinarme a tope y a cambiar de vistas.
Francesc Calafell (Investigador Principal del IBE, "docente en confinamiento")
Hola Francesc, ¿cómo es esto de dar clases a distancia de un día para el otro?
Es extraño. Yo tenía las clases escritas y ahora las he adaptado y colgadas en el aula Global de la UPF para que los estudiantes las lean. Una de las adaptaciones ha consistido en incluir, como notas a pie de página, las anécdotas que explico en clase o las digresiones hacia otros temas. He abierto foros de discusión para cada tema. Me ha sorprendido ver que hay grupos de estudiantes que estudian juntos y plantean conjuntamente sus dudas.
¿Cuál crees que es el mayor reto que tendrá que enfrentar este formato?
La inmediatez. En el formato que uso, no existe el equivalente de levantar la mano en clase y hacer una pregunta; los estudiantes preguntan, más que en una clase magistral, pero respondo al cabo de minutos u horas. No tengo tampoco la respuesta inmediata de cómo está yendo la clase: no puedo, como hacen los monologuistas, "leer el aula". Por otro lado, tengo la sensación de haber escrito un mini libro de texto...
¿Crees que esta experiencia cambiará la manera de enseñar?
Nos hará perder el miedo a los nuevos formatos, pero, más que una revolución, yo creo que será una evolución de aquello que ya está en marcha.
¿Hay algo que hayas aprendido durante estos días que quieras compartir?
Estoy aprendiendo a encontrar el equilibrio entre las rutinas diarias previas al confinamiento, que me dan estabilidad y tranquilidad, y la flexibilidad para encontrar alternativas igualmente satisfactorias cuando la costumbre antigua no puede ser.
¿Ya sabes qué es lo primero que harás cuando acabe el confinamiento?
Si las clases se retomaran antes del final del trimestre, pondría caras a algunos estudiantes que ahora conozco bien de nombre! Y cuando pueda salir a la calle, pasearé libremente por mi barrio, el Poblenou de Barcelona, hasta llegar a los 10.000 pasos.